martes, 9 de octubre de 2012



El cartismo

El cartismo fue un movimiento de la reforma social que surgió en el Reino Unido, que expresaba los problemas económicos de la clase obrera, derivados de los cambios producidos por la Revolución Industrial; y como afirma su nombre, éste es producto de la Carta del Pueblo (The People’s Cahrter), documento escrito el 7 de junio del año 1837 pero enviado al Parlamento Británico un año después, en 1838, el cual señalaba seis peticiones:




  1. Sufragio universal masculino (solo a los mayores de 21, con una capacidad mental sana, es decir cuerdos, y sin antecedentes penales).
  2. Voto secreto.
  3. Sueldo anual para los diputados, que permitiese a los trabajadores ejercer los derechos políticos.
  4. Reunión anual del Parlamento (evitaría el soborno).
  5. Participación de los obreros en el Parlamento (como no eran latifundios, no podían participar en la política).
  6. Que el número de representantes fuera proporcional al número de burgos.


 


Además, los cartistas pensaban que cuando los trabajadores alcanzasen el poder político, podrían adecuar las leyes a sus intereses de la clase.




Se manifestó en tres oleadas: en 1838, 1842 y 1848. Y aunque el movimiento duró una década (1838-1848), las reuniones acerca del movimiento terminaron en 1852.




Primera oleada


El 28 de Febrero de 1837 William Lovett escribió las 6 peticiones de la Carta del Pueblo, en nombre de la Asociación de trabajadores de Londres. Es relevante decir que Lovett había reclamado el derecho al sufragio universal en 1831, basándose en que si los obreros producían los ingresos del país, por lo menos tenían que tener derecho a tener participación política.


De esta oleada surgieron dos grupos originados por las diferencias entre los dirigentes del movimiento: los moderados y los radicales. Mientras que los moderados buscaban un balance y entendimiento entre las clases medias, los radicales, buscaban la revolucion social.




Segunda oleada


Esta impulsada por la crisis económica de esos años, la rebaja de sueldos y los problemas con los precios de los alimentos de primera necesidad tales como el pan, los cuales eran muy elevados. Esto era consecuencia de las leyes proteccionistas británicas, que establecían precios muy altos a la importación de trigo. Pero si bien estaban los que
buscaban el progreso del país (a futuro), estaba la oposición, en este caso el político y economista Richard Cobden que fue uno de los mayores defensores del librecambismo. Impulsó la Liga contra las Leyes de Cereales en el Reino Unido y a ella se unieron otros sectores sociales. Estos defendían la libre comercialización entre países sin la supresión de
aduanas y aranceles.
La segunda petición podemos compararla como a un antecedente de las huelgas de hoy en día, y se dió muy importantemente en los mineros de Gales y la Liga de Manchester (quienes mantenían políticas librecambistas). A partir de eso, el cartismo se vuelve un movimiento interclasista, y en 1842 esta movilización, además de mantenerse firme en las seis peticiones de la Carta del Pueblo, algunas peticiones sociales, entre ellas la que está contra los aranceles del grano.
El 4 de mayo de ese año se presenta la Segunda Carta del pueblo, la cual, respaldada por más de 3 millones de firmas, es rechazada por el Parlamento (Cámara de los Comunes) por 287 votos en contra a 47 a favor.

Como consecuencia, se provocaron Huelgas Generales en zonas del norte de Inglaterra y Escocia. Consecuentemente, muchos líderes del cartismo fueron arrestados y 79 militantes fueron desterrados a  Australia.





Tercera oleada

Con el comienzo de la tercer oleada del movimiento cartista, en el año 1846 se consigue que se rechacen las Leyes del Trigo (Corn Laws), las revoluciones liberales de 1848 en Europa hacen que las monarquías de dichos países afectados caigan, y posteriormente Europa en general será inundada de revoluciones. Como el pueblo quiere involucrarse en la política, pide el sufragio universal masculino y derechos sociales, como libertades de asociación, de manifestación, etc.

Además, el 22 de marzo de ese año, James Watson, Henry Hetherington y Richard Moore fundan la People´s Charter Union, que estaba en contra de la Asociación Nacional de la Carta. Un mes más tarde, el 10 de abril, los cartistas presentan la Tercera Perición, la cual aseguraban tenía más de 5 millones y medio de firmas, pero el Parlamento sólo validaba 1.975.496, incluyendo ya, varias falsificaciones. Como consecuencia de esto, hubo disturbios en Londres, se detienen a muchos de los manifestantes cartistas (que luego serían desterrados) y entre otras cosas, se logra disminuir la jornada laboral a 10 horas en las industrias fabriles.

Tras la rechaza de la última carta en 1848,  el movimiento pierde la importancia que tenía antes y sumando la muerte de varios de sus dirigentes, como Henry Hetherington, el cartismo se acerca a posiciones y problemas más socialistas.


En 1851, el periódico The Northern Star cierra y en 1858 se celebra la última convención cartista.


Consecuencias

  • Fracasó por las diferencias entre moderados y radicales, por la falta de contacto con la clase media y porque la economía mejoró entre la década del 50-60.
  • Motivó al renacimiento de los sindicatos.
  • Constituyó una importante experiencia para la clase obrera en su intento de mejorar las condiciones de vida, ya que fue el primer ensayo de organización política obrera.
  • Su acción forzó al gobierno británico a articular una legislación, que contó con un elevado contenido social, siendo un ejemplo de ello la “Ley de las diez horas” (reducción de la jornada laboral).
  • El cartismo supuso la toma de contacto de las masas obreras con la acción política, que hasta entonces habían concentrado su empeño en la conquista de mejoras de carácter laboral.
  • Contribuyó a aumentar la conciencia de clase y a que los obreros luchasen para aumentar la representación popular en el Parlamento.

No hay comentarios:

Publicar un comentario